UNIR Revista
El psicólogo jurídico trabaja con las personas en los distintos ámbitos del derecho, desde centros penitenciarios hasta menores involucrados en procesos civiles.
Un proceso jurídico, ya sea en sede judicial o en otros ámbitos, afecta a multitud de personas en distintas situaciones personales y familiares. El psicólogo jurídico, como profesional de la psicología, estudia la conducta humana en lo relacionado con el derecho, la ley y la justicia.
La psicología jurídica, por tanto, es la especialidad que aúna la teoría de la psicología con la situación legal de los distintos actores del mundo del derecho. Esto comprende el estudio, explicación, evaluación y tratamiento de los fenómenos psicológicos y conductuales que inciden en el comportamiento legal de las personas.
Por ejemplo, el psicólogo jurídico podría estar especializado en las declaraciones de un menor que debe actuar de testigo en un proceso judicial y necesita de un acompañamiento psicológico para afrontar dicha testifical, o bien, en cómo un hecho traumático o delictivo afecta a los procesos de memoria. En este sentido, los psicólogos jurídicos están presentes en situaciones en las que las víctimas o testigos declaran en una cámara Gesell, separados por un cristal de observación del resto de la sala.
Otro ejemplo de la labor de un psicólogo jurídico sería realizar evaluaciones de la idoneidad de un jurado para conocer un caso o estudiar situaciones victimológicas concretas.
¿Cómo ser psicólogo jurídico?
Al tratarse de un profesional de la psicología es necesario disponer del Grado en Psicología o un título homologable. Además, se requiere una formación especializada que aporte conocimientos relacionados con el derecho y el sistema jurídico español.
Para ello, existen posgrados especializados como el Máster en Psicología Forense online de UNIR, que incluye formación teórica, técnica y procedimental avanzada para poder participar en las distintas áreas de la psicología jurídica.
Además, para puestos más concretos, como el de los psicólogos jurídicos especializados en las víctimas, hay estudios más específicos como el Máster en Criminología y Victimología.
Tipos de psicología jurídica
El Consejo General de Psicología de España recoge en su página oficial distintos tipos de psicología jurídica:
Psicología aplicada a los tribunales o psicología forense
Por ejemplo, en la psicología jurídica y del menor, la que se aplica al derecho de familia o la aplicada al derecho civil, laboral y penal. En este ámbito, los Juzgados de Menores cuentan con psicólogos que trabajan en colaboración directa con jueces y fiscales. En cuanto a los Juzgados de Familia, asesoran en los procesos de separación y divorcio sobre las medidas a adoptar respecto a los hijos, entre otras funciones.
Psicología penitenciaria
En las Instituciones Penitenciarias Españolas las plazas de psicólogos están reguladas por ley, puesto que el sistema penal, según la Constitución Española, se orienta a la reinserción. Estos profesionales de la psicología jurídica trabajan con internos en diferentes área
Psicología judicial (testimonio, jurado)
El Consejo de Psicología lo define como “el conjunto de conocimientos basados en resultados de investigación de los campos de la psicología experimental y social, que intentan determinar la calidad (exactitud y credibilidad) de los testimonios, que sobre los delitos, accidentes o sucesos cotidianos, prestan los testigos presenciales”.
Psicología policial y de las Fuerzas Armadas
Esta labor incluye no solo acompañar a las personas que ya trabajan en las Fuerzas Armadas y que se enfrentan día a día con situaciones complejas, sino también participar en el proceso de selección de nuevos agentes.
Victimología
Los psicólogos jurídicos especializados en la atención a las víctimas trabajan codo con codo con los tribunales y otros órganos judiciales. Además, la ley de asistencia a las víctimas de actos violentos o delitos contra la libertad sexual contempla la creación de oficinas y asistencia a las víctimas en los propios juzgados.
Mediación
Los psicólogos jurídicos pueden realizar el papel de mediadores en determinados conflictos. Esta vía de solución alternativa de conflictos no es muy conocida en España, pero cada vez se está utilizando más.
