UNIR Revista
El psicólogo nutricionista enfoca desde un punto de vista psicológico y nutricional los problemas alimentarios con el objetivo de promover hábitos saludables y mejorar la conducta alimentaria hacia la comida.

Cada vez es más evidente que la alimentación y la salud mental están profundamente interconectadas; por eso, el especialista en psicología de la alimentación, mal llamado psicólogo nutricionista o psiconutricionista, surge para abordar de manera integral el bienestar de las personas.
Este profesional combina los conocimientos de la psicología y la nutrición —lo que se conoce como psiconutrición— para cumplir con una función clave en aspectos tan relevantes como los trastornos de la conducta alimentaria y la promoción de hábitos de vida saludables. Así pues, el psicólogo nutricionista cuenta con el Grado en Psicología y se ha especializado en nutrición. Al respecto, UNIR ofrece el Máster en Trastornos de la Conducta Alimentaria online.
Otra opción para ser psiconutricionista es cursar el Grado en Nutrición y Dietética y especializarse, posteriormente, en psicología de la alimentación. Sin embargo, aunque estos expertos pueden formar parte del equipo multidisciplinar que trate problemas relacionados con la alimentación, siempre deberán hacerlo bajo la supervisión de un psicólogo titulado.
¿Qué es un psicólogo nutricionista?
El especialista en psicología de la alimentación o psiconutricionista es un profesional especializado que combina conocimientos en psicología y nutrición para abordar de manera integral los problemas relacionados con la alimentación y la salud mental.
Su enfoque sostiene que los patrones alimenticios no dependen únicamente de requerimientos físicos, sino que también están moldeados por aspectos emocionales, mentales, sociales y culturales. Por lo tanto, este experto no se centra únicamente en los aspectos físicos de la nutrición, como el diseño de dietas personalizadas, sino que también considera los factores emocionales y psicológicos que influyen en los hábitos alimentarios de las personas.
Con todo, el objetivo del psicólogo nutricionista es promover una relación saludable con la comida, trabajando tanto en los aspectos psicológicos como nutricionales: ¿cómo nos influyen las emociones en nuestros hábitos alimenticios?
A través del concepto de relación dieta-salud mental (DMHR), se desarrollan nuevas metodologías para tratar trastornos con un componente emocional como la depresión, la ansiedad y el estrés, mediante intervenciones dietéticas personalizadas (en el caso del profesional que viene de la nutrición) o intervenciones psicológicas (en el caso del profesional que viene de la psicología). Cuando el primer profesional trabaja junto a psicólogos, el tratamiento es más completo.
Para aquellos que se preguntan qué hacer después de estudiar nutrición, especializarse en el campo de la psiconutrición es una opción altamente valorada. Con una sólida formación en áreas como la nutrición clínica, comunitaria y deportiva, el psiconutricionista puede tratar trastornos de la conducta alimentaria, mejorar la relación con la comida y promover hábitos saludables a largo plazo.
Funciones del psiconutricionista
Las funciones del psiconutricionista se derivan de la integración de diversas ramas de la psicología con la ciencia de la nutrición. Entre las cinco funciones más reconocidas de un psiconutricionista se contemplan las siguientes:
- Gestionar las emociones ligadas a la alimentación: ayudar a los pacientes a manejar emociones como la ansiedad, la compulsión por comer o la baja autoestima asociada al aspecto físico.
- Aplicar técnicas motivacionales: fomentar la autoestima, la autoconfianza y la seguridad personal para mejorar la relación con la alimentación.
- Reestructurar pensamientos distorsionados: trabajar con el paciente para cambiar creencias erróneas sobre la alimentación y el cuerpo.
- Promover hábitos nutricionales saludables: establecer y mantener rutinas alimentarias que sean equilibradas y sostenibles a largo plazo.
- Personalizar dietas y opciones alimentarias: adaptar la alimentación a cada persona según sus necesidades específicas, considerando factores como alergias, intolerancias y costumbres personales.
- Investigar el bienestar mental: cómo impactan los nutrientes en el funcionamiento del cerebro y en el manejo del estrés, ansiedad y depresión.
¿Qué trastornos trata un psicólogo nutricionista?
Los psicólogos nutricionistas desempeñan un papel crucial en el manejo de psicopatologías o trastornos relacionados con la alimentación y la nutrición que afectan al bienestar general de la persona. El enfoque de estos expertos considera la diferencia entre nutrición y alimentación: mientras la nutrición se centra en el impacto científico y biológico de los nutrientes en la salud, la alimentación incluye aspectos culturales y psicológicos del comportamiento alimentario.
Su completa formación les permite ofrecer soluciones personalizadas que abordan tanto los aspectos emocionales como los nutricionales de trastornos alimentarios como:
- Desórdenes del comportamiento alimentario: se dan cuando se usa la comida como estrategia para manejar emociones como estrés, ansiedad, tristeza o aburrimiento. Aquí encontramos la alimentación emocional y el síndrome del comedor nocturno, por ejemplo.
- Problemas metabólicos: es decir, enfermedades metabólicas con componente psicológico como la obesidad, síndrome metabólico o diabetes tipo 2. Todas ellas pueden verse empeoradas por una mala relación con la alimentación.
- TCA (Trastornos de la Conducta Alimentaria): como la anorexia, la bulimia y el trastorno por atracón.
- Problemas de imagen corporal: ansiedad relacionada con la imagen corporal, o fobias y obsesiones alimentarias que pueden desencadenar en neofobia infantil u ortorexia, en la que la persona solo se alimenta con productos que considera saludables.
- Estrés relacionado con la alimentación: episodios de ansiedad e, incluso, estados depresivos que afectan a los hábitos alimenticios.
Los psiconutricionistas tienen en cuenta las últimas tendencias en alimentación que promueven dietas equilibradas y sostenibles en sus tratamientos.
Llegados a este punto hay que remarcar una cuestión: los psiconutricionistas que no vienen de cursar psicología en la universidad sino nutrición (aunque después se hayan especializado en psicología de la alimentación), están capacitados para intervenir en psicopatologías vinculadas a la alimentación, pero siempre en colaboración interdisciplinaria con psicólogos y otros profesionales de la salud.
Esto es así porque el nutricionista no actúa como terapeuta psicológico, aunque complementa el tratamiento psicológico al trabajar en la alimentación consciente, la educación nutricional y la creación de planes alimenticios adaptados. Este trabajo conjunto es clave para abordar de manera integral estas psicopatologías.