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El retorno a la oficina, en un contexto aún marcado por el coronavirus, incrementa la presión en el ámbito laboral y la necesidad de actuaciones preventivas ante situaciones de estrés.
El término síndrome postvacacional hace referencia a las dificultades de adaptación a las actividades habituales que experimentan algunas personas tras el periodo vacacional. Puede generar problemas físicos, emocionales, sociales y laborales. Los más habituales son cansancio, insomnio, lentitud en la toma de decisiones, ansiedad o depresión.
Este año, además, en nuestro país un elevado número de personas que durante la pandemia han permanecido en teletrabajo desde sus domicilios, se plantean la vuelta al trabajo presencial. Un total de 4.405.320 personas disponían de la opción de teletrabajo al comienzo del confinamiento en España (22,3% del total de población ocupada) y, en su pico más alto en 2019 ascendió a 19.779.300 personas, variando este porcentaje notablemente según las distintas ocupaciones[1],[2].
Prevención del estrés
El retorno al trabajo, asociado a la situación creada por la pandemia, en un contexto de vuelta a una normalidad no exento de incertidumbre, incrementa la presión en el ámbito laboral y, con ello, la necesidad de actuaciones preventivas ante situaciones de estrés.
El estudio Covid-19 Global Impact [3] especifica que, el 55% de los trabajadores han pedido más apoyo en cuestiones de salud mental
Se destaca el abordaje de situaciones generadoras de problemas de salud mental y con ello, las acciones preventivas en bienestar emocional y salud física pasan a ser prioritarias en salud laboral. Su objetivo no es solo de incrementar la productividad laboral en las organizaciones, sino la consecución de una persona integrada socio laboralmente y más feliz. Ante esto surgen dos cuestiones de interés prioritario:
¿Cómo pueden velar las compañías por la salud física y emocional de sus trabajadores?
Se ha constatado que el entorno laboral tiene un fuerte impacto en la salud mental de los trabajadores, especialmente en situaciones límites de alta exigencia profesional. Esta problemática se puede ver exacerbada por el impacto de la pandemia en muchas empresas que han tenido que cesar su actividad y a sus trabajadores inmersos en Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE), con perspectivas poco halagüeñas en un futuro próximo[4].
Tanto el miedo a la enfermedad como las secuelas de lo vivido, la inseguridad laboral, la pérdida económica y el desempleo pueden tener graves consecuencias en la salud mental. Es necesario disponer de recursos que permitan responder a lo que la mayoría de los trabajadores está demandando: recibir apoyo psicológico dirigido a todos los colectivos, trabajadores sanitarios y no sanitarios.
Los servicios de medicina y enfermería del trabajo, integrados en los servicios de prevención de las empresas, son pieza clave para implementar estas medidas en organizaciones saludables, con una plena integración preventiva en todos los estamentos de las mismas.
¿Qué medidas deberían tomar las empresas para paliar el impacto del síndrome post vacacional?
Se proponen las siguientes:
- Fomentar las relaciones y la comunicación interpersonal en todas las esferas de la organización para evitar o reducir la probabilidad de aparición de trastornos relacionados con el estrés. La interacción social en el lugar de trabajo facilita compartir situaciones vividas y el estado de ánimo actual para un mejor afrontamiento.
- Fijar periodos de trabajo y descansos, con un horario que puede ser más o menos flexible al comienzo, pero bien delimitado y ajustado a las opciones de cada empresa u organización. Esto ayudará a evidenciar sí el ritmo de trabajo es el adecuado o se están asumiendo más tareas de las que puede abordar el trabajador en su jornada laboral presencial tras un periodo previo de trabajo virtual o vacacional.
- Promover en los trabajadores el mantenimiento de ritmos biológicos y hábitos saludables, especialmente en ciclo de sueño y alimentación sana y regular. Estas recomendaciones no solo repercuten sobre la salud física, sino también en la salud mental.
- Establecer estrategias para dosificar el uso de la tecnología, desconectando en los periodos de ocio o descanso e intentar fomentar en este tiempo actividades diferentes y compartidas con otros.
- Potenciar la práctica de ejercicio físico, fundamental para ayudar a disminuir el estrés, además de actuar en prevención de lesiones musculo esqueléticas u otros problemas de salud.
- Crear un espacio de trabajo positivo, con buenas condiciones medioambientales que generen un ambiente propicio para trabajar en un entorno relajante y saludable.
- Mantener una rutina laboral, con reuniones periódicas y agendas estructuradas y con horarios específicos para descansos y tiempo de almuerzo o comida. Estas pausas regulares facilitan la creación de una rutina de normalidad en el trabajo diario.
- Planear en la organización, o facilitar el acceso a talleres de control del estrés, o actividades de relajación como yoga, mindfulness, etc.
El retorno al trabajo tras un periodo de desconexión vacacional y, especialmente tras ausencias prolongadas como la que ha supuesto la pandemia por COVID-19 y la potenciación del teletrabajos on situaciones que puede favorecer situaciones de estrés en los trabajadores, con consecuencias en su salud física y mental.
Desde las empresas se pueden poner en marcha actuaciones preventivas para minimizar el impacto, o evitarlo si es posible.
Los servicios de prevención de las empresas son pieza clave para llevarlas a cabo y crear un entorno saludable en una organización socialmente responsable
Teófila Vicente. Doctora en medicina. Especialista en medicina del trabajo.
Bibliografía
[1] Fuente: Randstad, www.epdata.es
[2] Fuente: INE, www.epdata.es
[3] CIGNA COVID-19 GLOBAL IMPACT STUDY. https://www.cignainternational.com/static/docs/pdfs/en/Cigna_Covid-19-Wave-IV-Report.pdf
[4] Ruiz-Frutos Carlos, Gómez-Salgado Juan. Efectos de la pandemia por COVID-19 en la salud mental de la población trabajadora. Arch Prev Riesgos Labor [Internet]. 2021 Mar [citado 2021 Ago 30]; 24(1): 6-11. Disponible en: https://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1578-25492021000100006&lng=es. Epub 08-Mar-2021. https://dx.doi.org/10.12961/aprl.2021.24.01.01.