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El síndrome de Asperger en adultos conlleva dificultades para incorporarse en el mundo laboral y social, así como para entablar relaciones emocionales y de amistad.
El síndrome de Asperger en adultos es un trastorno del desarrollo neurológico que persiste en la adultez y causa alteraciones a nivel de las relaciones de pareja, las habilidades sociales y el uso del lenguaje con fines comunicativos. Pueden observarse rasgos repetitivos y perseverantes, existe una limitada gama de intereses.
Se trata de un trastorno crónico del que se desconoce la causa, aunque gran parte de los casos tienen una base genética. El síndrome de Asperger (SA) en adultos no es observable a simple vista, pero se manifiesta en el comportamiento social. No todas las personas tienen el mismo grado de afectación ni las mismas características, pero sí comparten un aspecto físico y una inteligencia normal o superior a los demás.
Características definitorias del síndrome de Asperger en adultos
Definiremos las características del síndrome de Asperger en adultos en:
- Déficit social: Las relaciones íntimas de amistad o pareja resultan inalcanzables. Dificultad para comprender las necesidades emocionales de los demás. Limitada comprensión de normas sociales. Poca flexibilidad para adaptarse a conductas.
- Dificultades de comunicación: Dificultad de la compresión de las pautas no verbales. Dificultad para expresar sus emociones. Estilo conversacional poco recíproco y anomalías prosódicas.
- Patrón de inflexibilidad: Incomodidad durante cambios inesperados, poca flexibilidad ante sus rutinas e intereses y actividades.
- Dificultades de tipo emocional: Autoestima pobre y escasa seguridad en sí mismo, soledad y sentimientos de incomprensión.
Otros síntomas: Dificultad para incorporarse en el mundo laboral, poca autonomía e independencia.
Dificultades de los adultos con síndrome de Asperger
En el síndrome de Asperger en adultos se han encontrado déficits en la cognición social, dificultad en el reconocimiento de emociones en el rostro que conducen a una disfunción en la interacción social y en el establecimiento de relaciones interpersonales. La empatía forma parte de la cognición social y nos ayuda a reconocer las emociones y sentimientos de los demás, área en la que los adultos con SA tiene un gran déficit.
Con todo esto, podemos ver que los adultos con síndrome de Asperger son personas que tienden a la soledad, tienen relaciones afectivas escasas y un pobre autoconcepto de su conducta social.
El síndrome de Asperger en adultos acarrea problemáticas como:
- Dificultad en las relaciones sociales: para entablar amistades como para profundizar en una relación. Esto causará problemas para mantener relaciones de pareja, causado por la dificultad para detectar emociones y sentimientos ajenos.
- Rituales y estereotipias motores que escapan de su control.
- Ansiedad y depresión.
- Autoestima y autoconcepto ambiguos.
- Incapacidad para planificar su futuro y metas realistas.
- Dificultades en la atribución de intenciones e identificaciones de los estados mentales de los demás, en la comprensión del lenguaje no literal y el uso de pautas de interacción social.
- El lenguaje presenta una correcta morfosintaxis y semántica, pero déficit en el componente pragmático y discursivo, en la comprensión del lenguaje figurado.
- Dificultad en la comprensión del habla indirecta y de las metáforas.
En el ámbito laboral, también se encontrarán dificultades como:
- Problemas durante las entrevistas de trabajo.
- Dificultades para tomar decisiones y alteraciones atencionales.
- Dificultades para el trabajo en equipo, dificultades para comprender las claves sociales y la comprensión del mundo mental de los demás.
Evaluación del síndrome de Asperger en adultos
La evaluación diagnóstica del síndrome de Asperger en adultos la realiza un neuropsicólogo en posesión del Máster en Neuropsicología clínica, pues en él se aprenden todos los pasos de una evaluación, que se componen de observación y entrevistas al paciente y familiares, la aplicación de tests y pruebas neuropsicológicas y la administración de cuestionarios.
Entre los cuestionarios que se utilizan se encuentran el Coeficiente de Espectro Autista (ASQ) (Baron-Cohen y otros, 2001 y Woodbury Smith y otros 2005) y el Coeficiente de Empatía (EQ) (Baron-Cohen y Wheelwright, 2004).
Además de la entrevista libre o estructurada existen entrevistas en las que se profundiza en aspectos más precisos de los síntomas y manifestaciones, como es la Entrevista Diagnóstica para el síndrome de Asperger (ASDI) creada por Gillberg, C (2001).
Tratamiento del síndrome de Asperger en adultos
Estimulación cognitiva e intervención neuropsicológica donde se trabajan aspectos relacionados con las funciones ejecutivas, Teoría de la Mente y Cognición social.
Terapia cognitivo – conductual caracterizada por el desarrollo de habilidades sociales, competencias emocionales y habilidades en el manejo emocional. Aprendizaje de estrategias para manejar ansiedad, ira y frustración. Estrategias para favorecer la autonomía e independencia y la búsqueda del desarrollo de nuevas conductas.
El tratamiento farmacológico se basa en fármacos para la depresión, ansiedad y agresividad como son los ansiolíticos y los antidepresivos.
Para finalizar, recordar que el síndrome de Asperger en adultos acarrea problemas en las relaciones sociales, dificultando las relaciones personales y de pareja y las posibilidades de incorporarse al mundo laboral. Por estas razones es muy importante seguir un tratamiento psicológico en el que se aprendan y desarrollen habilidades sociales, emocionales, comunicativas y nuevas conductas, que obtengan ayudas para hacer frente al mundo laboral y social, evitando así alteraciones emocionales como serían la depresión por el aislamiento y la soledad o la ansiedad.