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Muchos problemas académicos tienen su origen en algún tipo de trastorno del aprendizaje. Con el tratamiento adecuado, estos problemas tienen solución.
Los trastornos del aprendizaje son problemas en el procesamiento de la información que dificultan el correcto aprendizaje de la persona afectada. Estos problemas se dan en áreas concretas (lectura, matemáticas, expresión escrita, etc.) y están asociados, sobre todo, con los niños.
Estos trastornos se clasifican en función de las características de cada individuo, es decir, se determina que existen dificultades para el correcto aprendizaje teniendo en cuenta la edad, la inteligencia y el entorno del menor.
Algunas de las principales consecuencias emocionales o conductuales de los trastornos del aprendizaje son las siguientes:
- Tristeza o decepción en los procesos de aprendizaje.
- Frustración como consecuencia de la repetición de experiencias fallidas.
- Desinterés por el aprendizaje o la materia en la que se presentan dificultades.
- Problemas conductuales, como mal comportamiento en clase.
En conjunto, esto implica una brecha entre las habilidades y capacidades del desarrollo cognitivo del niño y las de los demás compañeros.
Asimismo, es muy importante distinguir entre trastornos y problemas de aprendizaje. En el primer caso, se trata de un problema vinculado al desarrollo neuropsicológico del menor. En cambio, en el segundo, las dificultades están asociadas con factores de otro tipo, por ejemplo, cuestiones psicológicas, familiares, económicas, socioculturales, etc.
Tipos de trastornos del aprendizaje
Existen distintos tipos de trastornos del aprendizaje, según las capacidades o habilidades que se ven afectadas. Estos son los más comunes:
Trastorno del aprendizaje en la lectura
Se presenta con la dificultad de percibir una palabra hablada como una combinación de fonemas diferentes. Esto afecta a la comprensión del propio funcionamiento de la lectura, entendida como una representación y combinación de letras y sonidos.
Los niños que presentan este tipo de trastorno del aprendizaje tienen dificultades para leer a un ritmo normal para su edad y para comprender correctamente lo que están leyendo, además de problemas de tipo ortográfico.
Trastorno del aprendizaje en la expresión escrita
Implica dificultades en el procesamiento de la información que afectan tanto a las habilidades visuales como a las habilidades motoras del niño.
Esto suele manifestarse con una escritura lenta y que requiere gran esfuerzo, dificultad para expresar los pensamientos por escrito, mala caligrafía, textos mal organizados y difíciles de comprender, y problemas con la gramática, la ortografía y la correcta puntuación.
Trastorno del aprendizaje en matemáticas
Dificulta al niño a la hora de comprender cómo funcionan los números y cuáles son las relaciones que se establecen entre sí. Esto implica problemas al realizar cálculos, utilizar símbolos matemáticos o comprender cuestiones matemáticas expresadas con palabras. Además, este trastorno también dificulta de forma considerable la capacidad de organizar y memorizar la información relativa a cuestiones matemáticas en general.
Trastorno del aprendizaje de las habilidades no verbales
Puede afectar a las habilidades visuales y espaciales, a las habilidades motoras y a las habilidades vinculadas al desarrollo social del niño. En función de las habilidades no verbales que se vean afectadas, el niño podrá manifestar dificultades de un tipo u otro.
¿Cómo se tratan los trastornos del aprendizaje?
Los trastornos del aprendizaje deben ser abordados con un enfoque multidisciplinar. Al tratarse de un trastorno del neurodesarrollo, es necesario que sea diagnosticado por un neuropsicólogo o un psicólogo educativo. Estos profesionales determinan el tratamiento más adecuado en cada caso y establecen las herramientas que ayudarán al niño a superar las dificultades presentadas en cada tipo de habilidad cognitiva concreta.
Asimismo, en aquellos casos en los que los trastornos del aprendizaje tengan repercusión emocional o conductual en el menor, estos problemas pueden ser tratados con la ayuda de un psicoterapeuta.
En ese sentido, cabe recordar la importancia de que los trastornos del aprendizaje sean identificados y diagnosticados por un profesional lo antes posible. De este modo, se podrán implementar las medidas necesarias de forma temprana, lo que evitará que los trastornos del aprendizaje puedan causar mayores problemas o dificultades al menor, tanto a nivel cognitivo y de neurodesarrollo como a nivel emocional o conductual.
