Funcionario de profesión, egresado del Grado en Psicología y actual alumno del Máster en Psicología General Sanitaria de UNIR, Jorge Dominguez es ejemplo de superación y mejora ¿Su próximo reto? Ayudar a las personas que están "en la crisis de la mitad de la vida"
Funcionario desde hace 24 años, inconformista y comprometido, Jorge Domínguez Fernández ha sido durante años alumno del Grado en Psicología y delegado de estudiantes de UNIR. Dos metas que superó con creces y que le han dado impulso para marcarse un nuevo reto: matricularse en el Máster en Psicología General Sanitaria de UNIR.
Comenzó en UNIR por recomendación de otras personas y por el feedback que encontró investigando sobre la universidad online, una decisión que surgió de su ímpetu por aprender y “hacer algo nuevo cada año: cursos de idiomas, marketing online, máster de coach…” Desde entonces, hace ya cuatro años, ha sido estudiante, representante de su grado y delegado de estudiantes de la universidad; tres funciones que ha desempeñado con diligencia por “aportar soluciones” y romper con la idea establecida de que todos los estudiantes universitarios tienen veintipocos. “Hay estudiantes más allá de los 18 años, y que hay muchas personas que por diferentes razones no han podido estudiar y quieren hacerlo”, indica Jorge Domínguez.
Yo he terminado y he salido con unos conocimientos que, sinceramente, pocas universidades son capaces de trasmitir. Sobre todo, la manera tan holística en que se realiza el aprendizaje”, señala el alumno de UNIR
Como estudiante del Grado de Psicología de UNIR, Domínguez destaca que “he aprendido a aprender” y anima a todos aquellos que se estén planteando matricularse en el grado a dar el paso porque “es apasionante, vais a aprender mucho. Yo he terminado y he salido con unos conocimientos que, sinceramente, pocas universidades son capaces de trasmitir. Sobre todo, la manera tan holística en que se realiza el aprendizaje. Es una meta que me propuse hace 4 años y aquí estoy, animándoos a que seáis los siguientes”.
Sin embargo, y más siendo parte de la primera promoción, estudiar un grado es una carrera de fondo en la que es fundamental ser constante. “En cada asignatura durante estos cuatro años, muchas veces sentiréis que se os pone todo cuesta arriba, que no llegáis, que os faltaría una semana más para repasar. Eso es un buen indicativo, porque cuando llegas a estar así, es porque ya tienes integrado el conocimiento que te están transmitiendo”, aconseja Domínguez.
Implicado Delegado de Estudiantes
Sus consejos son oro para otros estudiantes y la propia universidad. Una faceta, la de ayudar, que es innata; “desde siempre era la voz cantante. Creen que tengo un don para transmitir y pongo mucho empeño en el lenguaje verbal y no verbal, así como en tocar el lado emocional”.
Es este perfil el que le llevó a ser representante del grado, primero, y delegado de estudiantes, después, y que a día de hoy, aún sin haber empezado a cursar el Máster, ya le está abriendo puertas en departamentos de recursos humanos. “Hoy en día, las empresas están fallando en lo más básico, hay que empezar desde la base para que exista mejor productividad y funcionalidad”, concluye el alumno de UNIR.
A pocas semanas de comenzar un nuevo estudio en UNIR, el alumno afronta este nuevo reto con la misma ilusión de la primera vez que se conectó al campus online y que espera compaginar con la planificación de un programa de empoderamiento para “las personas que están en la crisis de la mitad de la vida”.
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