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El sueldo de un profesor de universidad está condicionado por el tipo de centro en el que imparte la docencia, el cargo o la responsabilidad que ostenta y la antigüedad.
Si en la escala de la enseñanza, los docentes de Infantil, Primaria y Secundaria son los encargados de sentar las bases del proceso de aprendizaje de quienes se convertirán en los adultos y adultas del futuro, los profesores universitarios se encuentran en el peldaño más alto, con la responsabilidad de formar ya a profesionales en diferentes campos. Esta última etapa resulta atractiva para muchas personas que a menudo se preguntan cuánto cobra un profesor de universidad para así valorar las diferentes opciones dentro del mundo de la docencia.
Resulta complicado definir con exactitud y de manera genérica el sueldo de un profesor universitario en España. De hecho, en diferentes portales de empleo, como Jobted, Gowork o Glassdoor, aparecen reflejadas cantidades estimadas diferentes: desde los 32.500 euros al año a los 43.400 euros. Incluso, indican que un profesor universitario podría comenzar en los 14.600 euros brutos anuales y acabar llegando a los 70.000 euros.
Factores que determinan cuánto cobra un profesor de universidad
Lo cierto es que existen varios factores que condicionan cuánto cobra un profesor de universidad, cuestiones como la comunidad autónoma en la que trabaje, el tipo de institución para la que lo haga, ya sea una universidad pública o privada, y las responsabilidades y complementos que haya adquirido:
Comunidad autónoma
Dos profesores de la misma categoría pueden llegar a cobrar sueldos muy diferentes dependiendo del lugar en el que ejerzan la docencia. Educación es una competencia transferida a las comunidades autónomas, por lo que son estas quienes establecen las cuantías de los sueldos e incluso los complementos que puede percibir un profesor. Estos complementos pueden estar relacionados con la propia comunidad, como incentivos de residencia como ocurre en las Islas Canarias o Baleares, o hacer referencia a ciertos méritos, como la formación y la productividad y a cuestiones como la investigación, la propia docencia o la gestión.
Tipo de universidad
Es el principal condicionante a la hora de establecer el salario. Los profesores de la universidad pública tienen categoría de funcionarios al haber accedido a la plaza a través de una convocatoria pública y, por lo tanto, en su nómina aparecen reflejados complementos como el destino o el tiempo trabajados, elevando la cifra final por encima de lo que cobra un profesor en la universidad privada, que ocupa un puesto para el que fue seleccionado. En este caso, su salario está fijado en un convenio laboral, independientemente de que el propio docente pueda negociar sus condiciones con el centro que lo contrata.
De todas maneras, en el caso de la universidad pública, por ejemplo, existen profesores con contrato fijo pero que no tienen en posesión una plaza. Aunque en este caso el sueldo está por encima del salario medio, sí es más bajo que el de un profesor que tiene plaza y suele estar en torno a 2.500 euros brutos al mes.
Categoría profesional y cargo
Un profesor universitario puede ocupar diferentes plazas (docente titular, profesor asociado, catedrático, investigador…) y también puede desempeñar algún cargo temporal (jefe de departamento, decano, rector). Todo esto influirá en la cuantía final que reciba como sueldo. Un rector, por ejemplo, verá reflejado en su nómina un complemento de unos 8.200 euros brutos anuales, un decano gana unos 4.100 euros.
Antigüedad
El número de años trabajados supone una parte muy importante del sueldo. Si un profesor sin experiencia tiene un salario medio de 15.000 euros al año, uno con más de 20 años cobraría unos 65.000 euros al año.
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