UNIR Revista
Estudiar matemáticas ya no significa acabar en un aula como docente. Al contrario: desde hace unos años, los matemáticos son los profesionales más demandados del mercado por las habilidades especiales que adquieren durante sus estudios.
Empresas, organizaciones y administraciones de todo tipo demandan cada vez más el pensamiento distinto, creativo y original de los matemáticos (out of the box). Sus capacidades de resolver problemas, de aportar soluciones distintas y de aportar nuevos métodos. Estudiar matemáticas dota de una adaptabilidad que, además, se suma a una capacidad de abstracción muy valorada en las corporaciones.
Los estudiantes de matemáticas salen de las facultades con una forma de pensar estructurada para adaptarse con facilidad a nuevos entornos. Encontramos matemáticos en multitud de sectores. Desde empresas vitivinícolas para modelar el proceso de fermentación y adaptarlo a cada cosecha, hasta agencias espaciales de vanguardia.
Un área con pleno empleo
Los matemáticos tampoco sufren paro gracias al auge de las ciencias de la computación. La Encuesta de Inserción Laboral de los Titulados Universitarios (INE) determinó que la tasa de paro de los graduados en estudios matemáticos no alcanzaba el 4 % (3,7).
La matemática computacional ya supone una especialidad de muy alto nivel académico y laboral. Por lo tanto, estudiar matemáticas y computación supone una oportunidad enorme para diversificar competencias y asegurar un futuro laboral brillante.
Compañías de distintas áreas, como informática, industriales u organismos oficiales, demandan profesionales altamente cualificados en matemática avanzada. La toma de decisiones de estudiantes preparados en este ámbito es muy valiosa para organizar sistemas de calidad, procesos de fabricación o para diseñar previsiones.
Estos profesionales alcanzan en el sector privado hasta los 70.000 euros anuales, muy por encima del salario que puede ofrecer la docencia. Así, más allá de dedicarse a dar clases, los matemáticos pueden trabajar en los siguientes ámbitos:
- Informática y Telecomunicaciones. La base del Big Data y la programación es la combinación entre las matemáticas y la computación. Una formación que combine ambas disciplinas permitirá adaptarse por completo a la gran revolución tecnológica que vivimos desde hace años.
- Inteligencia Artificial. Estudiar matemáticas también conlleva dominar las bases de la Inteligencia Artificial (IA), como el álgebra lineal, el análisis, la probabilidad o la estadística. Un sector que requiere constantemente de perfiles profesionales matemáticos por la alta demanda del sector empresarial.
- El sector de la banca siempre busca en las facultades de matemáticas a los denominados científicos financieros por su capacidad para resolver con éxito problemas muy complejos y aplicar modelos de análisis cuantitativo.
- Marketing y Publicidad. Los matemáticos son igualmente capaces de manejar con facilidad porcentajes de consumidores o de fijar objetivos cuantificables. Además, son perfiles idóneos para establecer Key Performance Indicators (KPI), indicadores clave de rendimiento.
- Logística y Transporte. Las matemáticas protagonizan el desarrollo de modelos con los que facilitar la toma de decisiones estratégicas en estas áreas, resolver problemas y diseñar nuevas formas de movilidad.
- Diseño multimedia. Una gran alternativa profesional para los estudiantes de matemáticas. Se les pueden abrir las puertas del diseño multimedia para crear videojuegos, apps, pódcast, vídeos, animaciones y otros productos audiovisuales.
En general, estudiar matemáticas proporciona toda una serie de conocimientos para trabajar con datos, plantear métodos y soluciones originales y establecer patrones bien definidos, características muy valoradas en cualquier equipo multidisciplinar.
¿Por qué especializarse en matemáticas en UNIR?
La Escuela Superior de Ingeniería y Tecnología (ESIT) de UNIR dispone de los títulos Grado en Matemáticas online y Máster en Ingeniería Matemática y Computación, que se pueden cursar de forma totalmente online.
El plan de estudios del grado aporta habilidades en el desarrollo matemático avanzado y en el manejo de herramientas fundamentales como Matlab, Python o Wolfram. Ahonda también en cada una de las actuales ramas profesionales matemáticas y, por lo tanto, ofrece a sus egresados competencias con las que afrontar cualquier reto laboral nada más salir de la Facultad.
Además, cuenta con un abanico de asignaturas que lleva los números hasta la informática. Las matemáticas componen un 66 % de sus materias, seguido de un 23 % de programación y un 11 % de computación.
El posgrado, por su parte, ofrece asignaturas como Métodos Numéricos Aplicados, Modelado de Sistemas Dinámicos, Optimización, Programación Científica y HCP o Técnica Multivariantes y Machine Learning con las que aporta una visión completa de las posibilidades de esta ciencia.
En concreto, se trabaja el modelado y la simulación de problemas, se abordan los métodos numéricos para resolver ecuaciones y se profundiza en otro aspecto interesante como es la estadística. Las optativas determinan la orientación preferida del estudiante: profesional o investigador.
¿Cómo accedes a estos estudios?
El acceso para estudiar matemáticas en la universidad ha cambiado radicalmente. Cada vez se ofertan menos plazas y las notas de corte son mayores. Los preinscritos en estudios matemáticos como primera opción hace seis años (curso 2015/2016) no llegaron a 3.000. Este último curso superaron los 8.000.
Ya hay 54 universidades que ofertan estos estudios (eran 40 hace seis años) y las plazas disponibles han crecido casi un 30 %. Pero por cada aspirante que accede estos estudios, otros dos no entran.
En el caso de UNIR, acceder al Grado en Matemática Computacional conlleva cumplir con:
- Selectividad.
- Título de FP o Grado Superior.
- Prueba de mayores de 25 años.
- Prueba de mayores de 45 años.
- Acreditación de experiencia para mayores de 40 años.
- Otros títulos universitarios y oficiales equivalentes, también extranjeros cumpliendo unos parámetros.
Por otro lado, para acceder al Máster en Ingeniería Matemática se ha de estar en posesión de un título universitario oficial español o de otro estado miembro del Espacio Europeo de Educación Superior (EEES). Las titulaciones requeridas son Matemáticas, Estadística, Físicas o Ciencias Físicas. Pero también se aceptan ingenierías superiores o técnicas porque tienen una base suficiente de conocimientos para abordar con garantías el posgrado.
Tres de las diez ocupaciones que más crecerán de aquí a 2030 están directamente relacionadas con las matemáticas, según la Oficina de Estadísticas Laborales de Estados Unidos. La demanda, lejos de disminuir, crecerá con fuerza. ¿A qué esperas para estudiar matemáticas?
