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Desde el diseñador del videojuego al ingeniero de sonido o programador, el equipo detrás de un videojuego debe estar compuesto por profesionales del sector.
Tal ha sido la evolución de la industria de los videojuegos en la última década que cada vez es mayor la demanda de profesionales cualificados en distintos ámbitos. ¿Qué trabajos relacionados con los videojuegos existen? Lo cierto es que han ido surgiendo distintos trabajos especializados.
Estos son algunos de los perfiles más demandados por las empresas del sector:
Diseñador de videojuegos
Es la persona que plantea la idea del juego y define tanto su apariencia como la jugabilidad. Entre sus funciones está el diseño de la interfaz y su estructura. De todas maneras, un game designer no programa, aunque es imprescindible que sepa manejar los principales motores de la industria (Unity y Unreal para crear sus prototipos, ajustar mecánicas, implementar lógica o IAs, etc.).
Dentro del sector del diseño, encontramos:
- Level Designer: encargado de diseñar los distintos niveles del juego.
- Combat designer: encargado de diseñar los combates, las acciones y los costes de vida de los “ataques”, etc.
- UI designer: responsable de diseñar las interfaces del juego.
El salario medio en España es de unos 31.000 euros anuales. Este variará en función del puesto y la experiencia, con lo que el sueldo de un diseñador de videojuegos oscila entre los 18.000 y los 35.000 euros anuales. Sin duda, ser diseñador de videojuegos es una opción profesional bastante interesante.
Programador de software
El diseño del software que permite crear el juego es responsabilidad del programador. Él será quien convierta en códigos e instrucciones la idea del diseñador. La suya es la parte más técnica, pues consiste en llevar el juego a las diferentes plataformas (consolas, ordenador, tablet, móvil). Hay diferentes tipos de programadores: Programadores de Gameplay, de Gráficos, de Herramientas o de Sistemas, etc.
Si existe una figura imprescindible para poder desarrollar un videojuego, esta es la del programador de software. Por eso, este perfil es uno de los más demandados en la industria. Su salario oscila entre los 22.000 euros y los 32.000 euros de media anuales, siempre dependiendo de su experiencia y capacidad.
Tester
El tester de videojuegos es el encargado de probar el juego en su fase de desarrollo, antes de ser lanzado al mercado. Los tester no diseñan ni participan activamente del proceso creativo, pero su labor es fundamental para que el juego salga lo más pulido posible.
Su objetivo es realizar un pormenorizado examen de calidad, comprobando si existen fallos o errores que deberá registrar para que puedan ser solventados. Además, debe valorar el resultado de la experiencia, es decir, si los juegos cumplen con los requisitos que cada plataforma exige.
El sueldo de un probador de videojuegos suele ir de los 18.000 hasta los 25.000 euros anuales.
Diseñador narrativo
En un videojuego el guion cobra especial importancia. Además de la jugabilidad, la historia es una pieza clave, una buena trama contribuye a enganchar a más jugadores que, por otra parte, cada vez quieren argumentos y personajes más complejos. Estudios como Naughty Dog
o Santa Mónica Studio con obras como “The last of us” o “God of War” demuestran que cada vez son más los jugadores que buscan historias con profundidad narrativa y personajes que vayan desencadenando tramas cada vez más complejas. Esto hace que a día de hoy los diseñadores narrativos estén más demandados.
El diseñador narrativo tiene que ser capaz de motivar al jugador para que este continúe avanzando niveles y no abandone. Además, no debe perder de vista nunca la jugabilidad, pues la historia debe adaptarse a la mecánica del juego. Así pues, debe trabajar conjuntamente con el desarrollador.
Es importante que distingamos varias figuras:
- Director Narrativo: encargado de definir la historia y de ofrecer una visión global de la trama que se va a diseñar en el videojuego.
- Narrative Designer: encargado de implementar la narrativa.
- Guionista: encargado de escribir los diálogos.
Animador
Su función es la de dar vida y movimiento a los distintos elementos gráficos (assets) que interactuarán con los personajes. El animador digital debe conjugar arte y técnica para abordar la parte estética y contar con una gran dosis de imaginación. De su creatividad dependerá el resultado final.
Podemos encontrarnos con dos tipos de animadores:
- Technical Artists: encargados de hacer el rigging, el pesado y el skinning de los personajes, así como los distintos elementos animados como coches, puertas o cualquier asset que requiera algún tipo de movimiento.
- Animadores: encargados de trabajar por keyframes, animación tradicional o con Motion Capture (captura de movimientos). Su función principal es limpiar las animaciones apoyadas en el rig creado por los Technical Artists.
Dentro del bloque de arte nos encontramos con numerosos artistas que pueden especializarse en:
- Concept Artist: una figura fundamental en el proceso creativo. Los Concept Artists son los responsables de comenzar a visualizar las ideas expuestas en las primeras reuniones del equipo de desarrollo. Su función es la de establecer la dirección visual del proyecto.
- Artist 2D/3D: encargado de crear el 2D o 3D (según su especialidad) de los personajes, los entornos, los assets… del juego.
- Environment Artist: artista que trabaja creando los entornos del videojuego. Su función es la de crear texturas, materiales, terrenos, iluminación, etc. Trabaja codo con codo con el Level Designer.
- VFX Artist: especializado en crear los efectos especiales del juego (fuego, lluvia, explosiones, etc.). Necesita tener conocimientos de programación y de arte 3D y 2D.
- UI Artist: artista que se especializa en la creación de interfaces: menús, pantallas de carga o el Hud que vemos al jugar. Estos profesionales, al igual que los diseñadores, tienen que estar muy familiarizados con conceptos como la experiencia de usuario para facilitar la inmersión del jugador en el juego.
Ingeniero de sonido
El sonido ha sido siempre una parte fundamental del juego, de hecho, en los primeros videojuegos, los sonidos prácticamente eran la única señal de qué era lo que estaba ocurriendo en la pantalla. La función del ingeniero de sonido es ayudar a contextualizar la acción o a crear atmósferas y no se limita a la música. Además de aportar información, el sonido tiene una capacidad enorme de influir sobre el jugador.
Localizador
En la era de la globalización, los videojuegos, al igual que la inmensa mayoría de productos, nacen con el objetivo de llegar al mayor número de público posible y, para ello, han de apostar por el mercado internacional, por lo que todo su contenido ha de ser localizado a los diferentes países/idiomas.
Productor
Los productores no tienen un impacto tangible en el producto final (videojuego): no tiran líneas de código, no diseñan, no realizan ningún elemento visual del juego, pero son los encargados de que este salga al mercado con la calidad necesaria, en el tiempo y presupuesto acordado.
Tienen que ser unos enamorados del proceso de desarrollo, saber gestionar personas y conocer metodologías ágiles como scrum que ayuden al equipo con la gestión diaria y defina límites, además de tratar de mantener la creatividad del equipo.
Marketing manager
El lanzamiento de un videojuego nuevo al mercado debe ir respaldado por una estrategia previa, trabajo que corresponde al departamento de marketing, el cual debe trabajar en diferentes escenarios, medios de comunicación tradicionales, redes sociales, eventos y la propia comunidad de seguidores del juego.
La industria del videojuego hoy
El crecimiento de la industria del videojuego queda reflejado en las cifras que recoge la Asociación Española de Videojuegos (AEVI) en su Anuario de 2021. Con una facturación total de 1.795 millones de euros, un 2,75 % más que en 2020, los videojuegos siguen siendo una de las principales alternativas de ocio audiovisual y cultural.
En 2021 se vendieron 6.948.452 de videojuegos y 1.017.642 de videoconsolas, pero España no solo destaca en el consumo del producto sino también en su desarrollo. A día de hoy, la industria genera más de 9.000 empleos directos y de calidad, lo que supone un impacto en la economía del país de 3.577 millones de euros.
Según el Libro blanco del desarrollo español de videojuegos elaborado por la Asociación española de empresas productoras y desarrolladoras de videojuegos y software de entretenimiento (DEV), la previsión es que en 2024 el sector haya creado más de 11.000 puestos de trabajo. A los empleos directos hay que sumar los freelances y los empleos indirectos. Todos esos trabajos exigen perfiles profesionales en ámbitos tan distintos como la programación y el diseño o incluso el arte.
Así pues, las salidas laborales relacionadas con el sector de los videojuegos son muchas y cada vez más especializadas. La industria está en constante evolución y sus cifras garantizan el futuro laboral de miles de personas en nuestro país. En ese sentido, estudiar el Grado en Diseño y Desarrollo de Videojuegos o un Máster en Videojuegos es una excelente opción. Ambos estudios se ofrecen en UNIR en modalidad 100 % online.
